La editorial Marvel lleva décadas sorprendiendo y maravillando a los lectores de cómics con sus series más importantes, lanzando a nuevos superhéroes y marcando una era en lo que a este arte se refiere. Del Capitán América a Spiderman, de Iron Man a Hulk, los personajes creados en su mayoría por Stan Lee con la ayuda de gente como Steve Ditko o Jack Kirby son hoy en día parte de la cultura popular. A esto también ha ayudado la creación del UCM, el Universo Cinematográfico de Marvel, un ambicioso proyecto que comenzó a finales de la década de 2000 con Iron Man, a través del cual la empresa quería sacar mayor tajada de sus licencias de cómic para las adaptaciones al cine. Las películas de superhéroes ya estaban dando frutos, pero solo cuando Marvel se hizo con el timón de la situación  llegaron a convertirse en el género más popular de todos.

La eterna pugno con DC, que tenía a Superman y Batman, se fue desequilibrando poco a poco a favor de Marvel, ya dentro de Disney, que contaba cada estreno como un auténtico éxito en taquilla. La creación de ese universo compartido en el que muchos superhéroes convivían y aparecían en las películas de los otros, al más puro estilo de los crossovers comiqueros, ha permitido a la empresa seguir sacando frutos de estos personajes, incluso los de “segunda fila”. Más allá de la primera línea de Los Vengadores, otros muchos superhéroes han entrado de lleno en el Universo Cinematográfico Marvel, y ahora han encontrado también su hueco en la televisión, en la plataforma Disney +, donde se estrenarán diferentes series que tienen a estos personajes como protagonistas. La etapa en el streaming comenzó a principios de 2021 con el estreno de Wandavisión, que dejó a todos encantados. Posteriormente llegó Falcon y El Soldado De Invierno, serie que seguía las andanzas de Sam Wilson y Bucky Barnes después de que el Capitán América original le entregase el escudo al primero. ¿Ha cumplido la serie con las expectativas?

Los personajes en los cómics

Falcon es un personaje de cómic creados por Stan Lee para Marvel, en colaboración con el dibujante Gene Colan, y que apareció por primera vez en 1969. Por su parte, El Soldado de Invierno es el alias que se le da a Bucky Barnes, un antiguo compañero de Steve Rogers, el Capitán América, después de ser capturado por Hidra, que lo utiliza como asesino a sueldo tras lavarle el cerebro. El personaje se introdujo en 1941, también en la cabecera del Capitán América, primero como su compañero de andanzas o sidekick y más tarde como un enemigo, tras ser capturado por Hidra. Sus creadores fueron Jack Kirby y Joe Simon. Ambos personajes han contado con sus propias series e incluso una conjunta, de la que la adaptación televisiva toma algunos temas. Sin embargo, siempre se les considera personajes secundarios en la órbita de Capitán América, un puesto que curiosamente ambos han ostentado, después de la muerte/retirada de su amigo Rogers.

Una continuación a Endgame

Igual que Wandavisión, la serie de Falcon y El Soldado de Invierno se establece en el Universo Marvel después de los sucesos acontecidos en Endgame, cuando los Vengadores consiguen derrotar finalmente a Thanos y devolver a todo el mundo que había desaparecido cinco años antes. La situación que queda después de Endgame, con Tony Stark fallecido y Steve Rogers retirado y anciano, permite explorar las historias de los otros Vengadores. En el caso de Sam Wilson, su regreso después de cinco años coincide con la decisión de Rogers de cederle el escudo, y por tanto, aunque sea implícitamente, también el testigo como Capitán América. Sam tendrá que lidiar con esa responsabilidad mientras que investiga, junto a Bucky Barnes, a un grupo terrorista llamado Los Sin Bandera, que están en contra de la reagrupación de exiliados y refugiados por culpa del Blitz, el regreso de tantos millones de personas después de su desaparición cinco años antes.

La serie: trama y nuevos personajes

Sam Wilson y Bucky Barnes, compañeros que al principio no se llevaban demasiado bien pero que aprender a trabajar juntos, deben descubrir quién está detrás de un grupo peligroso de terroristas llamado Los Sin Bandera. Este grupo, encabezado por una joven con poderes sobrehumanos llamada Karli Morgentheau, realiza acciones violentas contra las decisiones gubernamentales de echar a millones de personas de sus hogares, para entregarlos de nuevo a la gente que los había abandonado con el primer chasquido de Thanos. Sam decide entregar el escudo del Capitán América al Gobierno de los Estados Unidos, ya que no quiere cargar con esa responsabilidad. Sin embargo, se molesta al ver que el gobierno se lo ha dado a un joven soldado llamado John Walker, que parece una copia de Steve Rogers. Barnes, por su parte, tiene que lidiar con sus remordimientos por haber sido un asesino a sueldo para Hidra.

La investigación de Wilson y Barnes les lleva a un callejón sin salida y a varios encontronazos con Walker, ya como Capitán América. Desesperados por encontrar una solución a sus problemas, deciden acudir al Barón Zemo, con el que lucharon años atrás en los acontecimientos de Civil War. Este les introduce en los lugares más peligrosos de una ciudad llamada Madripoor, donde vuelven a encontrarse con la ex-agente Sharon Carter, que trabaja allí encubierta y huyendo del Gobierno de los Estados Unidos. Los cuatro intentan encontrar a Karli y convencerla para que desista de su actitud, mientras Walker decide utilizar técnicas algo más expeditivas, mostrando una faceta casi cruel y violenta que poco tiene que ver con el espíritu que encarna el Capitán América.

¿Y ahora qué?

Tras los acontecimientos de Falcon y el Soldado de Invierno, algunas tramas quedan cerradas, pero otras han quedado en el aire, seguramente para las siguientes películas o incluso para una segunda temporada de esta serie. Sam Wilson por fin se pone el traje de Capitán América y decide luchar con el escudo que Steve le entregó. Barnes ha logrado superar sus remordimientos y ahora quiere ser un hombre libre. Por su parte, John Walker se convierte en el U.S. Agent después de ser degradado como Capitán América por el propio Gobierno, y Sharon Carter, de vuelta a Estados Unidos, revela sus verdaderas intenciones como Agente de Poder, augurando que dará mucho que hablar a partir de ahora estando infiltrada en el propio Ejército y con acceso a armamento de última tecnología.